Fruna ha sido noticia y el objetivo de una funa masiva por redes sociales en los últimos días, a causa de la falsificación de permisos y la creación de una guardería ilegal para seguir operando a pesar de no pertenecer al rubro de giros esenciales, poniendo en riesgo la vida de madres e hijos que se ven obligadas a dejar a sus pequeños en este sitio.
Pero este tipo de acciones negligentes y abusivas en contra de sus trabajadores es un comportamiento recurrente en la política laboral de esta empresa, si nos trasladamos a 2014 nos encontramos con que Fruna debió pagar una multa por la muerte de un trabajador; según consigna un informe de la Dirección del Trabajo (DT), muerte que no reportó en tiempo y forma.
Ya era conocido en el 2014 un número elevado de denuncias recibidas contra la empresa de Alimentos Fruna Ltda, por la violación a los derechos laborales de sus trabajadores, situación que solo ha aumentado en los últimos años.
En abril de 2017 se reportó la muerte de otros 2 trabajadores de la empresa, de los cuales, uno de ellos Rolando Venegas se suicidó en la fábrica. La familia de Rolando acusa que el hostigamiento laboral lo tenía profundamente afectado, situación que en una carta que el trabajador escribió antes de morir queda aún más clara.
En total, desde 2012 y 2017 hubieron 97 solicitudes de fiscalización formuladas por los trabajadores, organizaciones sindicales y terceros; 7 fiscalizaciones investigativas y 21 fiscalizaciones solicitadas por el empleador.
Entre empresarios y el contagio:
Volviendo al 2020, observamos que nada ha cambiado, la empresa continúa pagando por multas y sigue incumpliendo las normas, obligando a sus trabajadores a realizar su jornada laboral, aun cuando 7 de sus trabajadores han fallecido a causa del covid-19. Las paupérrimas condiciones laborales y las persecuciones anti sindicalistas son prácticas recurrentes dentro de Fruna.
El ministerio de trabajo, ante las repetidas denuncias, demandas e irregularidades en las fiscalizaciones, jamás han tomado verdaderas cartas en el asunto. Lo único que se ha hecho es obligar a la empresa a pagar una multa, situación que claramente no genera ningún cambio en la misma, pues continúa explotando y agrediendo a sus trabajadores.
A la fecha de hoy, hay 7 trabajadores fallecidos a causa del covid-19, y muchos otros contagiados, algunos en estado grave. Uno de los sindicatos de la empresa, la confrontó mediante una carta, la cual no fue tomada en cuenta por parte de la gerencia.
Fragmento de carta del sindicato n°3 de Fruna dirigido a la gerencia: “No hemos observado ningún tipo de acción que nos indique que la empresa esté cumpliendo con el mandato legal de proteger la vida y la salud de los trabajadores establecidos en el Código del Trabajo”.
Fruna ejemplo máximo de las ganancias sobre las vidas
Según relato de trabajadores, cuando algún compañerx es diagnosticado con Covid-19, Fruna les exige que se atiendan en salud pública, y no en la correspondiente Mutual de Seguridad, llevando así a que se oculten las verdaderas cifras de contagios y la existencia de más muertes a manos de estos empresarios.
La pesadilla no termina ahí, varias madres, trabajadoras de la empresa mencionada han dado a saber que se ha creado un centro clandestino de cuidados para que estas dejen a sus hijos y así continúen trabajando. Las mismas, no tienen permiso ni siquiera para salir a amamantar a sus hijos dentro de la jornada laboral.
Este “jardín infantil”, funcionaba con un permiso, extendido desde la empresa Fruna, el cual está fuera de las normas, pues, unicamente Carabineros tiene el poder legal para extender un permiso de este caracter. Además de la falta legal de la empresa, abrir este «jardin infantil» lleva al incumplimiento de las políticas preventivas desarrolladas por el ministerio de salud, vulnerando los derechos de estos niñxs y sus madres, en el recinto no se mantiene un distanciamiento entre los niños, un lavado de manos recurrente,etc.
Patricia Vázquez una de las madres y trabajadoras de Fruna declaró lo siguiente: “Todas las madres están en lo mismo y nadie hace denuncia porque tienen miedo. A la sala cuna iban como 30 mamitas, ya que nos vemos obligadas a trabajar, a veces no nos daban permiso ni para amamantar. Muchas mamitas tienen que venir a dejar a sus bebés temprano y tomar micros. Este jardín era supuestamente una ayuda que nos daban para trabajar, pero la empresa nunca nos dijo que funcionaba de forma ilegal”.
Que rabia esto…
— Vagabundo ilustrado (@vagoilustrado) June 26, 2020
Trabajadora y Dirigenta sindical de empresa #Fruna: "Nosotros/as somos animales para ellos".
Relata que que decenas de trabajadoras tenían que dejar a sus hijos, varios de ellos lactantes, en el Jardín que puso clandestinamente la empresa. Y no les daban EPP. pic.twitter.com/IKaguVr6sB
Este tipo de acciones demuestra lo que los empresarios están dispuestos a realizar para continuar generando ganancias, no importa si los trabajadorxs mueren o si deben poner en riesgo a niñxs, las ganancias están sobre todo.
Estas acciones se fundamentan y legitiman en el sistema capitalista, en el cual no importan los medios que se utilicen para continuar acumulando riquezas, el objetivo es lucrar. Para esto, se recurre a la continua explotación y negación de los derechos laborales, un claro ejemplo es lo realizado por Fruna.
A su vez, es necesario dejar en claro, que el historial de esta empresa no es pequeño cuando hablamos de denuncias y condiciones precarias de trabajo, por ende, ¿como es posible que continúe en funcionamiento? ¿cómo es posible que no se hayan tomado acciones para prevenir este tipo de abusos?
El desgobierno es aliado del sistema, aliados del empresariado y por ende, aliado de los opresores. Así, queda demostrado que los verdaderos cambios no se generarán a partir del Estado, y si a partir de la movilización popular, de base, a partir de los trabajadores que han sido oprimidos y explotados.
Lo que le sucedió a estos trabajadores, no es ajeno a nosotros, muchos nos vemos obligados a ir en una micro llena, a tomar el metro en las mismas condiciones, a ir a puestos laborales que no nos aseguran las medidas sanitarias mínimas, a no poder ir a un hospital porque no nos van a atender debido al colapso, a no poder ir a una clínica por ser pobres, a salir a trabajar de manera independiente porque no tenemos nada que comer, y en todas y cada una de estas situaciones no hemos podido respetar el distanciamiento necesario, ¿Cuál es la irresponsabilidad? La negligencia del desgobierno.
No hemos sido escuchados y mientras no nos hagamos escuchar por la fuerza, no vamos a seguir siendo tomados en cuenta, los hechos están a la vista.
Es por ello que el 2 y 3 de julio te invitamos a que sumes tu rabia a cualquier tipo de manifestación, tomando todas las precauciones sanitarias, vamos contra el régimen y sus medidas asesinas, que el grito de Chile despertó, se haga realidad una vez más.