El escenario del territorio hoy es complejo y vertiginoso en las condiciones que la crisis sanitaria provocada por el covid19 y el actuar errático de los gobernantes han provocado.
El escenario del territorio hoy es complejo y vertiginoso en las condiciones que la crisis sanitaria provocada por el covid19 y el actuar errático de los gobernantes han provocado. Las medidas de mitigación de los contagios han sido contraproducentes, insuficientes y contradictorias: nos dicen que nos quedemos en casa pero que no pueden evitar que nos despidan o que no nos paguen el sueldo. Nos dicen que pensemos en la población más vulnerable pero no hacen nada con el hacinamiento y la falta de medidas sanitarias en las cárceles del país, de hecho se ignora y posterga desbordándose inevitablemente.
Ante esta situación a lo largo de todo el territorio el lunes 6 de abril se ha efectuado una acción colectiva y masiva elaborada desde el interior mismo de las cárceles manifestando el descontento y demandas de la población penal organizada. Algunos han adjudicado la acción a un creciente movimiento de protesta intracarcelario, concertado, meditado y autoconsciente. Lxs prisionerxs de las cárceles, denominados malamente presos comunes, hoy levantan diversas manifestaciones como paralización de actividades, huelga del rancho, huelgas de hambre progresivas y huelgas de hambre total. Este grado de organización y autodeterminación no es novedad en la lucha por los derechos de las personas privadas de libertad, teniendo en el corto plazo el antecedente de la huelga nacional de hambre de mayo de 2019. Estas herramientas de luchas son la reacción visionaria de la población penal que teme por su vida y arriesga encontrar la muerte ante la negativa e irresponsabilidad de las autoridades de gendarmería y del estado de chile, lxs compañerxs prisionerxs han sido lxs primeros en tomar medidas voluntarias para proteger los recintos de la llegada del virus y sus familiares, amigxs y afines han debido correr con los gastos de los insumos que el sistema carcelario debiera proveerles por ley. Lxs compañerxs se ven empujados a realizar estas acciones con el fin de visibilizar su situación ocultada al interés público y exigir las mismas medidas de protección que los especialistas en salud requieren para la población en medio libre: mascarillas, desinfectantes y evitar aglomeraciones.
Compartimos las demandas de lxs compañerxs en prisión que apuntan, siguiendo el ejemplo de otros países, a minimizar el impacto de un contagio en las condiciones carcelarias actuales, disminuyendo el hacimiento en los recintos, solicitando cambio de medidas cautelares, entrega de artículos de salubridad y consideración de enfermedades preexistentes como antecedente para facilitar la descongestión interna.
La Coordinadora 18 de Octubre, que trabaja por la liberación de lxs presionerxs políticxs de la revuelta entiende que este contexto incluye y une a toda la población penal. Atendemos el llamado solidario de lxs prisioneros de la revuelta confinados en prisión preventiva en el módulo 14 de Santiago 1 que se han sumado a las movilizaciones con una paralización de actividades y huelga de rancho. Solidarizamos y acompañamos todas las formas de movilización que lxs presos del estado de chile estén levantando. Hacemos un llamado a todx individuo, organización, colectivx y asamblea a solidarizar y apoyar a quienes se encuentran privadxs de libertad. El llamado es a estar atentxs a su situación, siguiendo el curso de los acontecimientos y disponibles al proceso de protesta nacido al interior de lxs centros de exterminio estatales o concesionados, normados de mujeres, de niñes y de hombres. Hoy más que nunca hagamos eco de sus voces y de sus exigencias
Cambio de medidas cautelares ¡ya!
¡Insumos sanitarios para todxs!
¡Los queremos libres! ¡Los queremos vivos!