El presidente Uruguayo a mediados de marzo (específicamente a 10 días de asumir su gobierno) firmó un decreto, en el cual se estipula la reducción en un 15% los gastos e inversiones en los organismos estatales, esto bajo el discurso de que el ajuste fiscal era necesario ya que la economía estaba cayendo en picada y el gasto público era muy grande frente a los beneficios que estaba dejando.
La reducción de los gastos de las empresas públicas llevó por todos estos meses un sentimiento de repudio y abandono por parte de los trabajadores, que frente a este nuevo gobierno derechista y pro empresariado se ve directamente atacado, sufriendo también la población uruguaya en general, ya que los servicios públicos verán afectada su calidad frente a este recorte de grandes magnitudes.
La lucha es de todos y contra un mismo enemigo
Movilizarse es más que necesario, pero el problema con el PIT CNT y su llamado a la protesta se centra en que anteriormente ha firmado un acuerdo con el Ministerio de Trabajo por un aumento salarial del 3%.,Así, ya pactado el acuerdo, igualmente salen a manifestarse en contra de estas medidas contra la rebaja salarial de los públicos (los cuales recibirán ajustes de sueldo por debajo de la inflación). Una central sindical poco honesta, pues primero firma el puñal en la espalda a los trabajadores y luego llama a “ defender los derechos y el salario”.
Creemos necesaria la lucha contra este recorte y la LUC, que sin dudas dejará un vacío de derechos en el país hermano, entendemos que las leyes que se buscan aprobar por medio de este paquete condensado de leyes retrogradas, punitivas y represivas son el paso de Uruguay a acercarse a la situación de nuestra constitución Pinochetista.
Recordemos que este paquete de leyes en cuestión criminaliza y restringe los derechos a la protesta y a la huelga, bombardea y mercantiliza la educación pública, introduce nuevos delitos y permite a la Policía disparar por la espalda aludiendo a “legítima defensa”, como puntos principales, tiene mucho más que esto.
La central Sindical del PIT CNT hoy en día, moviliza mucho las bases obreras, pero para mantenerlas controladas, ya que como bien sabemos al igual que en Chile, las centrales sindicales y los partidos políticos de la llamada “oposición” están inundados de energúmenos que trabajan a favor de los intereses de los capitalistas.
Si es verdad que existe un proceso de desmantelamiento de las empresas estatales, y un intento de gestar las bases a través del condensado de leyes en la LUC que permitirán la persecución y criminalización de todos aquellos que se opongan al gobierno y a este sistema capitalista que defiende, pero la lucha debe gestarse realmente de forma combativa y revolucionaria, sin la aparatosa y burocrática entidad del PIT CNT que únicamente moviliza cuando no le queda de otra y firma arreglos a la espalda de los trabajadores.
Nuestros compañeros uruguayos deben comprender que si siguen creyendo que solo con el PIT CNT y el Frente Amplio, se logrará terminar con los brutales ataque que enfrenta la clase trabajadora en la actual están completamente perdidos.
La única forma de imponer los intereses de los trabajadorxs frente a los de la Burguesía es a través de la organización clasista, combativa y revolucionaria a partir de la base social y no a través de una máquina burocrática que está completamente comprada.
Desde Chile esperamos que nuestros hermanos miren a los países aledaños y comprendan que la lucha se traba en la calle, con convicción y a partir de nuevas organizaciones o la reconstrucción de las que ya existen a partir de un corte clasista.
La lucha continua, y en diversos frentes, Latinoamérica tiene gobiernos y defensores del capitalismo, los cuales están dispuestos a matar y torturar a todos aquellos que busquen rebelarse e imponer la Dignidad y la Vida del pueblo, sobre las riquezas acumuladas y expropiada de los trabajadores por el empresariado.
Compañeros uruguayos, luchen con garra, con fuerza y con conciencia.