Desde el día jueves hemos sido testigos de cómo la Confederación Nacional de Transporte de Carga (CNTC) mantiene los cortes de carretera en la zona sur del país, a pesar de asegurar la llegada de insumos básicos y paso de ambulancias, la verdad es que el desabastecimiento de combustible, y mercadería ya se empiezan a sentir en varias zonas.
Todo esto ante la protección y sumisión por parte de los entes represores, quienes se han dedicado a proteger a los grupos de camioneros en su paralización criminal, mientras por otro lado se encargan de reprimir fuertemente otro tipo de manifestaciones ciudadanas de carácter pacífico, como la ocurrida en la Plaza de la Dignidad el día viernes 28, donde quedaron detenidxs 21 personas.
Por otro lado, también se ha evidenciado la violencia ejercida por parte de los camioneros quienes agreden a varios de sus colegas quienes se abstienen de unirse a la paralización y siguen laborando normalmente, ante esta situación, no hay ningún ente persecutor que impida el amedrentamiento por parte de este grupo y al estar alineados con el gobierno es evidente que los camioneros poseen no solo protección especial, si no también inmunidad ante las leyes represivas que fueron diseñadas para coartar el derecho a manifestarse, aun cuando esta evidenciado el carácter criminal de la paralización ejercida por este gremio.
CON EL VISTO BUENO DEL GOBIERNO, LA PARALIZACIÓN SE RADICALIZA.
Para nadie es un secreto que las leyes represivas que se están exigiendo aprobar desde la CNTC como punto central para deponer la paralización, no responde a una exigencia de seguridad para el gremio, responde directamente a los intereses que se alzan con fuerza por parte de Piñera, quien busca aprobar a como dé lugar, las leyes represivas que le permitan estar a la cabeza de un nuevo ente de inteligencia muy similar a lo que fue la CNI en dictadura, todo esto antes de que llegue la fecha del plebiscito.
Las forma de presionar al senado para la legislación rápida de estas leyes se vio reflejada el día de ayer sábado 29 donde después de enviarse una propuesta desde el gobierno al gremio de camioneros, la respuesta de parte de este, fue endurecer las medidas de paralización, agregando una restricción a la llegada de mercadería hacia la zona de Temuco, hecho que constituye un delito y el gobierno deja para flagrantemente.
A través de un comunicado, desde la CNTC expresaron que “en reunión convocada para el efecto se ha estimado pertinente rechazar la propuesta de acuerdo enviada por el Gobierno, dicha decisión fue tomada por el comité de crisis en uso de sus atribuciones”.
En ese contexto, el presidente de la Federación gremial de dueños de camiones del Sur (Fedesur), José Villagrán, anunció que tomaron “la decisión de seguir en la movilización”.
Villagrán agregó que “no nos vamos a ir hasta que nos den lo que nos corresponde” además agregó interpelando a Piñera “Aquí se acabó, presidente, la impunidad. O hacen ustedes la pega o los camioneros los vamos a obligar, al ejecutivo, al parlamento y al poder judicial, de que una vez por todas hagan la pega para los chilenos”, disparó.
Finalmente Villagrán llamó a los camioneros a “guardar” sus camiones en sus bodegas. “No vengan a Temuco, porque si vienen con mercadería lamentablemente se van a quedar en Temuco“, amenazó.
Ante esta situación y la más que evidente colusión entre el gobierno y el sector históricamente fascista de camioneros, quienes desde antes de la dictadura han servido a los intereses del opresor, no queda de otra que salir a luchar, no solo en contra de esta paralización criminal en plena pandemia, si no en contra también las medidas represivas que se pretenden instalar a base de la fuerza.
Desde el gobierno, están aprovechando la distracción que supone el inicio de campaña para el plebiscito, resguardándose en l falsa esperanza de la población sobre el cambio que va a significar que se apruebe cambiar la constitución, aprovechándose de esta distracción pretende atar aún más cortas las riendas de la opresión y la explotación en Chile, donde no queden espacios para la protesta y la reivindicación social.
Sin embargo desde el viernes pasado, fuimos parte y testigo de cómo la población está volviendo poco a poco a la lucha, porque estamos conscientes que no es momento para bajar los brazos.
Es por esto que ante la situación criminal, la impunidad evidente y las amenazas el pueblo debe rebelarse con fuerza nuevamente, desde donde pueda y como pueda la lucha debe continuar. La jornada de protesta comenzara desde el 4 al 11 De septiembre, porque no nos vamos a quedar indiferentes ante la arremetida criminal del gobierno y sus aliados para seguir reprimiendo y explotando al pueblo, la campaña del terror y las mentiras deben ser combatidas en las calles.