Para nadie es un secreto que desde que llego la pandemia a nuestro país, se agudizo visiblemente el problema económico y social preexistente, y en contra del cual hemos venido luchando activamente desde el 18 de octubre.
Durante estos dos últimos meses hemos visto y padecido la ineficiencia y falta de consciencia humana, de los entes que forman parte del desgobierno, quienes únicamente se han preocupado de crear leyes y decretos que aseguran la estabilidad económica de las grandes empresas y dejan en total desahucio a las Pymes, trabajadores independientes y trabajadores formales,
En el último caso, referente a los trabajadores formales, se han fomentado los despidos masivos y supuestas vacaciones obligatorias sin derecho a pago, dejando cesante a una gran cantidad de la población, eso sin contar las perdidas en los fondos de las AFP que afectan a toda la población contribuyente, compuesta fundamentalmente por las y los trabajadores, la estafa más grande de la historia.
Y la problemática no termina allí, a las personas que aún continúan con su trabajado se les obliga a ir en condiciones sanitarias precarias en medios de transporte donde es imposible respetar el distanciamiento seguro, aun no se ha visto una respuesta efectiva por parte del desgobierno, quien entrega millonarios presupuestos a los entes de la represión, dejando de lado la sanitización obligatoria y el aporte de insumos a los trabajadores de la salud.
Dentro de este marco de total abandono por parte del Estado inoperante e inútil, nos encontramos entonces con iniciativas nacidas del más puro sentido humano como la que se dio ayer en la población de la Pintana (población históricamente combativa) al sur de Santiago.
El grupo de la Primera Línea del pueblo, organizo en conjunto con los vecinos una jornada de olla común, en solidaridad con las personas más golpeadas económicamente producto de la crisis actual, esta es una iniciativa que no pretende quedarse en una sola jornada, se está organizando de manera constante y cuenta con el apoyo de toda la comunidad y esperemos que aún se sumen más.
Esto no fue financiado por ningún ente gubernamental, evidentemente y da cuenta de que el aporte de una comunidad reunida, vale mucho más que cualquier limosna con la cual el desgobierno pretenda aplacar la crisis reinante.
Los grupos que conforman la Primera Línea, no son solo camotazos y consignas, tampoco son partidos políticos que pretenden comprar la simpatía del pueblo mientras coimean a sus espaldas, son sencillamente parte de la población organizada que busca solucionar por sí misma la problemática generada por el desgobierno empresarial.
Hoy estuvimos en la comuna de la Pintana, en la población el castillo repartiendo almuerzo.#lapintana#elpuebloayudaalpueblo#chile@PaoladrateleSUR @valpoinformado@S3lavictoria@MegafonoPopular@PiensaPrensa pic.twitter.com/Oph6XyruxV
— La primera del pueblo (@La1delpueblo) May 3, 2020
No son solo ollas comunes, también es sanitización en la vía publica, ayudas a las personas de la tercera edad que se encuentran desamparadas, y por supuesto la protección de las manifestaciones cuando retornemos a las calles.
Esperamos que estas iniciativas se repliquen en todas las regiones y comunas, porque solo el pueblo ayuda al pueblo, y ante el abandono por parte del Estado, la organización popular es la respuesta y la base para crear el país que necesitamos y merecemos, basta de pedir soluciones a quienes no son pueblo.
La lucha no se detiene, evoluciona y como dice la canción:
¡Lucha, consciencia, organización!
¡Por salud, vivienda, trabajo, educación!
¡LUCHA!
Si quiere ayudar a que esta bella labor continúe puedes aportar con lo que puedas, todo suma, síguelos en redes sociales:
